El bar ‘El Seis’ recibe de manos del delegado de Turismo la placa que le acredita como ganador de la XI Ruta de la Tapa

Esta mañana se hecho entrega de la placa que acredita oficialmente al bar ganador de la Ruta de la Tapa, así como también sirve de prueba visible que los restaurantes que la han obtenido en alguna ocasión exponen y muestran públicamente.

La gerente del Bar ganador, María José Gómez, ha recibido de manos del delegado de Turismo, Luis Conde, el correspondiente detalle que reconoce el premio; este año se decidía por un nuevo diseño: un plato de cerámica en vez de una placa. La creadora de la tapa ganadora, «Brocheta moruna de atún marinado con gula» “se mostraba muy contenta con el premio y agradece tanto a los que la han votado, como también a quienes la han probado”. M. Gómez nos informa de que «mantendré la tapa en carta para aquellos que no la hayan probado o quieran repetir». Por su parte, el delegado felicita a la ganadora y comunica que «se han cumplido los objetivos marcados inicialmente».

Con esta galardón, el Bar ‘El Seis’ se convierte por segundo año consecutivo en el ganador de esta Ruta, igualando con dos premios al Bar Montañes (2011 y 2014), seguido de Casa Manolo con uno (2012), y se mantiene como bar más galardonado hasta el momento, Casa Gamero con seis premios (2009, 2010, 2013, 2015, 2016 y 2017).

La elección del restaurante ganador ha corrido a cargo, otro año más, del público que ha disfrutado de la ruta. En total han sido 111 tapaportes los que han participado en la votación, entre los cuales se han sorteado dos premios: un premio de 200€, que ha recaído en Eva María Jiménez Vázquez, y un segundo premio, una cena en bar ganador de la Ruta, cuya agraciada ha sido Ana González López.

El resultado ha sido por votación popular la mejor de esta última edición de D’Tapitas con 40 votos, convirtiéndose en ganador por segundo año consecutivo. El segundo clasificado ha sido el restaurante ‘Casa Gamero’, seguido por el restaurante ‘El Montañés’ que ha conseguido el tercer puesto.

Este año la media de tapas servida por los bares ha rondado las 800, entre los dos fines de semana que ha durado, a pesar de la lluvia, y destacando el día de las elecciones generales como el que concentró a más gente en los bares.