Esta mañana el alcalde de Fuentes de Andalucía ha acudido a una reunión junto al resto de alcaldes de los municipios que forman parte de la mancomunidad de Écija (Écija, Cañada Rosal y La Luisiana) con el objetivo de hacer un frente común ante el recorte brutal que va a sufrir el servicio que se presta a las personas desempleadas desde Andalucía Orienta.
La nueva convocatoria del programa recorta de manera drástica, en más de un cincuenta por ciento los recursos del programa en nuestro territorio, que pasa de tener cinco a dos profesionales para todos los municipios de la comarca. Además de este recorte de personal, también se elimina la línea de acompañamiento en la búsqueda activa de empleo, que pasa solo por la orientación. El alcalde Fuentes de Andalucía ha mostrado en rueda de prensa su «absoluto rechazo a una política que supone algo tan grave como el desmantelamiento de la las políticas de empleo, que son esenciales para nuestros ciudadanos al igual que está ocurriendo con la sanidad y la educación». Para Francisco Martínez se trata de una convocatoria que anticipa la liquidación total del servicio ya que «estos recortes se realizan por cuestiones ideológicas y dejan de lado a los ciudadanos más vulnerables, porque existe financiación del gobierno central y fondos europeos. Además los datos avalan al Programa Andalucía Orienta, un servicio que funciona con más de tres mil usuarios atendidos en la comarca con un 80% de los objetivos cumplidos».
Por su parte el alcalde de Écija y Presidente de la Mancomunidad, David Javier García Ostos, ha destacado que «la Junta de Andalucía vuelve a tomar decisiones sin contar con los Ayuntamientos, que además afectan a un colectivo vulnerable». Según el alcalde de Écija «la intención de la Junta es transferir estas funciones a las oficinas del SAE, cuando su personal ya se encuentra en una situación precaria y sin intención de dotarlo de más recursos».
En la reunión, en la que no ha estado por motivos de agenda la alcaldesa de La Luisiana, pero que comparte con sus compañeros este rechazo a la reducción del servicio, se ha hablado, tal y como ha indicado el alcalde de Cañada Rosal, Rodrigo Rodríguez, de la obligación que tienen como alcaldes de denunciar los recortes brutales que están sufriendo los servicios básicos, más todavía en poblaciones pequeñas en las que no existe oficina del SAE y el servicio de Orienta cumplía una función muy importante, “creemos que va a ser al última convocatoria, una muestra más de desprecio a los Ayuntamientos y a las personas que usan estos servicios” ha añadido el edil.